SALA DE PREHISTORIA:

En esta sala presentamos expresiones materiales del desarrollo cultural de la Patagonia.
Se verifica la presencia del Hombre hace aproximadamente 13.000 años en la Provincia de Santa Cruz (recreación del yacimiento Los Toldos) y los resultados de las investigaciones realizadas en la provincia del Neuquén (Área Cuyin Manzano).
Se muestran las expresiones mágico-religiosas en los distintos estilos de arte rupestre, así como los instrumentos fabricados por los antecesores de los Tehuelche (comienzo de la era cristiana), aquellos aportados por los Mapuche desde Chile a partir de mediados del siglo XVII y la cultura material de los grupos Mapuche asentados en los sectores orientales de la cordillera, y los producidos por los ancestros de otras etnias que habitaron la Patagonia, desde el Río Colorado hasta la isla grande de Tierra del Fuego.
Todas estas expresiones materiales y simbólicas son expuestas como testimonios de los primeros hombres y mujeres que poblaron el extremo sur de América y desarrollaron culturas adaptadas a las condiciones que les ofrecían los distintos ambientes patagónicos.

SUR DE LA PATAGONIA:

Exceptuando los fechados radiocarbónicos del Nivel 11 de la Cueva Nº 3 de Los Toldos, es en esta región donde se dataron en la capa inferior de la Cueva Fell, los artefactos más antiguos de la Patagonia.
A partir de este sitio y el de la vecina gruta de Palli Aike (ambos cercanas al Estrecho de Magallanes) se elabora la llamada secuencia de Magallanes con cinco fases que se suceden en el tiempo, hasta épocas históricas, identificadas fundamentalmente por el tipo de puntas de proyectil característico de cada una de ellas.
Tierra del Fuego, al arribo de los europeos (fines del siglo XVI) estaba habitada por los Selk%u2019nam (onas) y Haush.
Estos grupos al igual que los que poblaron la Patagonia continental eran primordialmente cazadores de guanacos.
Los yacimientos arqueológicos excavados son pocos y no se puede aún establecer una secuencia clara, pero puede decirse que hace aproximadamente 10.000 años el norte de Tierra del Fuego estaba ya poblado y que el modo de vida adoptado por milenios tenía más similitudes con los de sus sucesores los Selk%u2019s nam que son sus vecinos del Canal de Beagle que basaron su economía en los recursos marinos.

DIFERENTES TIPOS DE PUNTAS DE PROYECTIL:

Fase Magallanes IV y V: (4.610 115 A.C.) y (1.265 90 D.C.) Ambas fases incluyen puntas de proyectil con pedúnculo y aletas, piedras de boleadora y raspadores supuestamente enmangables y en la fase V las puntas serían mucho más pequeñas y se añaden toscos utensillos de hueso.
Los restos de fauna asociados indicarían el predominio del guanaco, complementado con el ñandú y pequeños roedores, se supone que en forma temporaria se acercaban al litoral en busca de aves, mariscos y lobos marinos.
Posiblemente la industria de la fase V, fuera producto del grupo Aonik%u2019en o de sus inmediatos ancestros, así como en el Norte de la Tierra del Fuego las puntas de proyectil pedunculadas y los abundantes raspadores, serían obra de los antepasados de los Selk`nam.
Allí en un primer momento hubo un gran consumo de guanacos y roedores que luego se complementó con aves.
Fase Magallanes III:
(6.320 135 al 4.610 115 A.C.) Aparecen puntas de proyectil triangulares apedunculadas.
Durante esta fase los sitios varían por desarrollarse en ellos actividades generalizadas o muy limitadas: por ejemplo solo ser destinados a la matanza de animales.
Fase Magallanes II:
(7.080 al 6.530 135 A.C.) Se caracteriza por la total ausencia de puntas de proyectil de piedra tallada, por la presencia de puntas de hueso, abundancia de punzones y por cambios en la dieta, a pesar de que el guanaco sigue siendo la principal fuente de alimentación, se agregan chinchillones, tuco tuco y cururos, ñandú y algunas aves.
Fase Magallanes I:
(9.050 170 al 8.130 160 A.C.) Presenta puntas de proyectil llamadas "Cola de pez" predominio de raederas y se podría decir que existe un grado de incipiente de especialización en la economía.
El Norte de Tierra del Fuego se supone ocupado muy tempranamente, fechados sobre huesos indican 8.330 A.C. pero no se poseen mayores datos sobre estas ocupaciones.

Aquí deberían ir fotos de puntas de flecha y de otros artefactos.

CANALES E ISLAS MAGALLANICO - FUEGUINOS:

Si bien el área constituye geográficamente parte de la Patagonia, presenta grandes diferencias ecológicas con respecto a los territorios continentales.
En ese nuevo ambiente los grupos humanos antecesores lejanos de etnías como los Yámanas, debieron lograr la adaptación de su economía hacia el aprovechamiento de recursos costeros:
mamíferos marinos y gran variedad de moluscos complementando la dieta con pesca, caza de guanacos y aves.
Por otra parte el medio les brindó abundantes bosques para construir sus viviendas y canoas (elemento de gran importancia para su subsistencia).
Aparentemente esta adaptación al litoral fue rápida, siendo que a fines del siglo V antes de Cristo estaba consumada, permitiendo una densidad de población bastante importante.
Aquí irían fotografías de modelo de canoa yamana, restos oseos de lobo marino, restos oseos de delfin, restos oseos de ballena: cuña y descortezador.
Primer componente del Sitio Tunel:
(5.030 110 A.C. al 4.730 210 A.C.) El sitio Tunel es ocupado por cazadores de guanaco, que se aventuran hasta la costa en busca de nuevos territorios de caza instalando efímeros campamentos.
La costa Norte del Beagle no tenía aún su aspecto boscoso y los grupos no estaban adaptados al ambiente marítimo, del que pudieron aprovechar escasamente los recursos pues tenían instrumental específico para tales fines.
Fotos de Punzon, puntas de proyectil, removedor de corteza, raspadores puntas de arpon, cincel, cuña, raederas, raedera bifacial, puntas de arpon separable
Segundo componente del Sitio Tunel:
(4.800 A.C. al 3.160 130 A.C.) En esta nueva ocupación humana del sitio Tunel, está ya presente la cobertura boscosa.
Sus habitantes logran una adaptación exitosa. La economía se basa en el consumo de lobos marinos, complementada con ballenas, guanacos, aves y peces; se incrementa el consumo de moluscos sobre todo de mejillones que con los años darán origen a los conchales por la acumulación de los restos de valvas.
Abunda el instrumental de hueso en las puntas de arpón separables de su enmangado; se utilizó la cestería para recolectar moluscos y se supone fue muy importante el empleo de las canoas.
foto cesto de junco.
Componente antiguo de Lancha Packewaia:
(2.265 305 A.C. al 2.070-70 A.C) Continúan los asentamientos a orillas del mar entre depósitos de valvas.
Aparecen puntas líticas de lanza, seguramente asociados al aumento del consumo del guanaco y puntas de arpón con extremo fijo.
Punzones, raspador, raedera, puntas de arpon, cincel, caña, punta de lanza.
Fase reciente del canal de Beagle:
360 50 al 1670 85 D.C.) La fase correspondiente a la manifestación arqueológica de la etnia Yámana, nómades cazadores y recolectores de mariscos.
Reemplazan la lanza de grandes puntas líticas por armas arrojadizas pero de puntas más pequeñas.
Las puntas de proyectil presentan gran variedad tipológica, esto podría implicar el empleo del arco que decae paulatinamente al disminuir el consumo de guanaco.
restos de alimentación, puntas de proyectil, cuchillo, colgante raspadores, raederas, arpones de hueso

CENTRO Y NORTE DE PATAGONIA:

La más antigua presencia humana documentada hasta el momento para Patagonia se registró en el nivel 11 de la Cueva 3 Estancia Los Toldos, Prov. De Santa Cruz, fechada radiocarbónicamente en 10.650 600 A.C.
En Patagonia Central se destacan industrias líticas y estilos que perdurarán durante milenios, comenzando con el nivel 11 de la Cueva de Los Toldos y continuando con el Tíldense, Casapedrense, Protopatagoniense y finalmente el Patagoniense, antecesores de los aborígenes que poblaron la región en épocas históricas, Tehuelche meridional.
(Fotos de resto de piedra con pintura rupestre, boleadoras, puntas de proyectil, raspadores, raederas (de madera silicificada), perforadores, cuchillos de filos naturales, mortero y mano.

CUEVA TRES DE LOS TOLDOS:

La Cueva Nº 3 se sitúa en el Cañadón de las Cuevas de la Estancia Los Toldos, Prov. De Santa Cruz.
En un paraje de mesetas y cursos de agua temporarios con profundos cañadones. El clima es frío, seco y ventoso.
La zona está poblada de numerosas cavernas ocupadas por hombre desde tiempos remotos; rastros de su presencia es la decoración con pintura rupestre que cubren sus paredes.
La Caverna 3 consta de un recinto principal y un ambiente lateral.
Tiene un largo máximo de 22 metros por 20 metros de ancho. Fue excavada en parte por el Dr. O. Menghin en el año 1948 y a partir de 1971 por el Ing. A. Cardich y el Lic. A. Hajduk.
En el plano de su planta se observa la zona trabajada: una trinchera y tres cuadrículas laterales.

PERFIL DE LA EXCAVACION, CUADRICULA I, PARED SUDESTE:

INDUSTRIA DE NIVELES 1, 2 Y 3 (2.500 A.C.):
La ocupación no fue muy densa y según la industria lítica y residuos de alimentación se trataría de una cultura de cazadores de guanacos y ñandú.
CASAPEDRENSE (Capas 7 y 6)n (5.310) 350 A.C. al 2.900 A.C.):
Los casapedrenses fueron cazadores especializados de guanaco. Su industria lítica se caracteriza por la extracción y empleo de hojas (fragmentos muy alargados). No se registran puntas de proyectil y en su reemplazo se emplean piedras de boleadora y tal vez lazos y trampas.
TOLDENSE: Capa 9 y 10. (9.000 al 6.800 A.C.):
Para estos grupos la alimentación principal continuó siendo el guanaco, pero fue importante el consumo de aves; martinetas, ñandú petiso y grande y aparecen por última vez restos de caballo nativo.
El material lítico reduce su tamaño, aumenta la cantidad de raspadores para trabajar pieles raspándolas y ablandándolas.
Además en la cueva se encontraron pinturas de manos en negativo.
INDUSTRIA DEL NIVEL 11: (10.650 600 A.C.):
Se trató de grupos reducidos que ocuparon temporariamente la Cueva 3.
En su alimentación predominaba el guanaco, aunque posiblemente convivieran y consumieran équidos y un camélido ya extintos.
El instrumental de piedra que utilizaron era grande y tosco, abundando las raederas para el descarne de pieles.

RIO PINTURAS:

El protopatagoniense (río Pinturas III) Conserva las características del Casapedrense pero disminuye el tamaño y calidad del instrumental.
La dieta se hace más variada pero con neto predominio del guanaco.
Los Patagonienses cubren variedad de situaciones ambientales, aprovechaban la costa de los lagos y cañadones profundos de invernada, las planicies y las altas mesetas de veranada, siguiendo una dinámica que se basaba posiblemente en los desplazamientos propios del guanaco.
Se registra la presencia de bolas de boleadoras, placas grabadas (con alguna significación mágica), hachas ceremoniales o en forma de 8, pipas y también se registra la costumbre de enterrar a sus muertos en chenques.
Se divide el Patagoniense en: Típico (río Pinturas IV), Cerámico (río Pinturas V) y Ecuestre (río Pinturas VI) Siglos XVIII y XIX D.C. que corresponde al contacto con los españoles y la adopción del caballo por los tehuelche.

PATAGONIENSE- TEHUELCHENSE:

Pertenecen a culturas cazadoras, correspondiendo al acervo de los primitivos Guénena-Kúne, tehuelche septentrionales. Estos tipos datarían de poco antes del comienzo de la conquista, continuando durante todo el transcurso de la misma. Tiene valor mítico-mágico y ceremonial.
Función terapéutica, protectora, amuleto. Se encuentran en territorio chileno.

NOROESTE DE PATAGONIA:

Los fechados más antiguos conocidos para ocupaciones humanos en el noroeste de Patagonia datan del 8.000 al 6.000 A.C. en los sitios de Cuyín Manzano, Traful I y Casa de Piedra. Su principal fuente de alimentación estaba constituida por el guanaco y seguramente una abundante recolección de frutos y vegetales. En la cuenca del río Limay el guanaco posiblemente fuera reemplazado por fauna menor.
Penetración mapuche:
Se piensa que antes del S. XVI este pueblo inicia desde Chile su avance hacia el noroeste de la Patagonia Argentina.
Existen sitios que en sus niveles superiores, Cuyín Manzano, Bajo Añelo, Montículo Angostura, denotan presencia efectiva o simples contactos con ese grupo ya en el S. XVI; otros hallazgos en cementerios atribuibles a principios del S. XVIII, indicarían neta presencia mapuche.

GRUPO DE RASPADORES:

Su función fue la de RASPAR y ABLANDAR PIELES volviéndolas elásticas.
El trabajo se realizaba con el filo en posición frontal por presión y empuje y girando el artefacto por presión y tracción.

GRUPO DE PERFORADORES:

Instrumentos constituidos por una "base" de diferentes formas y una punta que se destaca del resto de la pieza, tallado uni o bifacialmente.
Tercer asentamiento (Fase cultural A) Distintivo de este asentamiento posterior a la conquista son: una industria ósea, la alfarería, el hilado y el cambio en la industria lítica en relación a la adquisición del caballo, instrumentos de molienda, economía ganadera, persiste la caza y el comercio en especial con la zona pacífica.
Posible desplazamiento de antiguos cazadores recolectores, al ser invadida el área por un grupo portador de un sistema agrícola sedentario, pudiendo haber explotado en un principio las mismas fuentes de recursos, hasta que la competencia por los campos de pastura y agua, margina a los cazadores a zonas más áridas de Neuquén.
Segundo asentamiento (Fase cultural B) debe haberse desarrollado en el marco de un mejoramiento climático hasta el 5.000-4.000 A.C. Se caracteriza por una economía cazadora fundamentalmente del guanaco, se especializaron en la confección de instrumentos destinados a la caza y faenamiento de ese animal y tratamiento de sus derivados (huesos, tenedores, grasa) Aparecen por primera vez instrumentos de molienda, conteniendo en varios casos restos de pintura roja y ocre.
Primer asentamiento (Fase cultural C) Tiene lugar hacia el 8.000 A.C.; al abrigo de una cueva que los protegía de las inclemencias del tiempo y animales, cercana a ojos de agua, vegetales para recolectar y abundante materia prima para su industria lítica (raspadores, cuchillos, raederas y otros), además de constituir un lugar estratégico para la caza del guanaco y roedores como el tuco tuco y zorros.

Dos elementos se conjugan para variar las costumbres de los pobladores de Pampa y Patagonia:

1. LA INFLUENCIA ARAUCANA O MAPUCHE.
2. LA INFLUENCIA EUROPEA.
1. INFLUENCIA ARAUCANA:
Araucanización de La Pampa y Patagonia.
La presencia de elementos de la cultura araucana o mapuche y su asentamiento efectivo en nuestro territorio sobre culturas cazadoras recolectoras, respondió a la persecución que ejercieron los españoles en Chile y a la existencia de este lado de los Andes, de animales de caza, ganado cimarrón (caballos-vacas) y a la sal comestible.
El proceso de araucanización se produjo a través de los pasos cordilleranos ubicados desde Mendoza hacia el sur, siendo la vía más importante la provincia de Neuquén. Comenzó en siglo XVI con la adopción progresiva de la lengua, la religión y elementos materiales (cerámica y tejidos) para culminar en siglo XVIII y XIX con el ingreso masivo de tribus mapuche.

CONTACTO HISPANO INDIGENA:

Adopción del caballo:
Un factor de cambio en la forma de vida de los pueblos cazadores-agricultores fue la introducción del ganado europeo, en especial el caballo en el siglo XVI.
Se producen varias modificaciones, entre ellas la adopción de largas lanzas que reemplazan el arco y la flecha. Los aborígenes se convierten prácticamente en cazadores de caballos, del cual toman su carne como alimento; la tradicional vivienda %u201Ctoldo%u201D se hace con pieles de caballo con el pelo hacia adentro y pinturas del lado de afuera.
Con el cuero de este animal confeccionaron, mantos, botas, lazos, riendas y muchas piezas del apero de montar.
Los nervios y ligamentos se usaban para coser y las crines para sogas. Por otra parte el caballo amplía extraordinariamente la capacidad de desplazamiento y carga.
Se utilizó también como elemento de trueque entre los indígenas y entre éstos y los españoles.
Recién en la segunda mitad del siglo XVII, comenzaron a aparecer elementos confeccionados en cuero vacuno y a fines de este siglo proveen vacas cimarronas a otros indígenas y a los españoles, incluso a Chile.